(ANS – New York) – En las últimas semanas la representación salesiana ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) ha promovido varios eventos para profundizar algunos temas sociales muy cercanos a los Hijos de Don Bosco: la defensa de los más débiles contra los traficantes de seres humanos; el desarrollo social; el problema del HIV.
El pasado 10 de febrero los Salesianos de Don Bosco y los padres Escalabrinianos (S.C.) presentaron conjuntamente un foro – paralelo al encuentro de la Comisión sobre el Desarrollo Social de Naciones Unidas – relacionado con el tráfico de seres humanos. Al encuentro participaron varias personalidades de la sociedad civil, activistas y algunos representantes de los gobiernos.
Formado por décadas en el trabajo de protección a las víctimas de trata, el padre Florenzo Rigoni, C.S., Director de la obra “Casa del Emigrante” de Tapachula, estado de Chiapas, México, inició los trabajos con una presentación bajo el título “Pobreza y tráfico de seres humanos: un binomio de nuestros tiempos”. En la conferencia el religioso señaló las estructuras sociales que crean un terreno fértil donde los traficantes siembran su explotación.
El padre Leonir Chiarello, C.S., Director Ejecutivo del Centro Internacional para las Emigraciones de los padres Escalabrinianos, amplio el debate con el vínculo que existe entre tráfico de seres humanos, emigraciones y trabajo forzado, focalizando su intervención sobre la realidad de Brasil. En su relación el padre Chiarello manifestó claramente cómo, si bien la esclavitud está prohibida en la sociedad moderna, en realidad en diversos países, muchas personas viven como esclavos, tenidos como prisioneros de empresas criminales que engañan las personas más vulnerables, caídas en la red de la pobreza, con la falsa promesa de un trabajo digno.
Después, a través de las relaciones “La protección de las víctimas de los traficantes” de la señora Irmgard Pundt, vice directora de la Casa del Emigrante de Tapachula, fueron evidenciados los daños sufridos de quienes han sido víctimas de tal tráfico. La señora Pundt narró de que manera están trabajando los operadores de la casa del Emigrante y cómo buscan sanar las heridas de las mujeres y de los niños que han experimentado los horrores de la explotación sexual.
Durante el debate, los relatores dieron respuesta a muchos interrogantes sobre los temas expuestos: desde la protección de quien trabaja por salvar las víctimas del tráfico, a los programas de prevención para las poblaciones vulnerables, desde la persecución de los traficantes a la tutela de las mujeres durante eventos deportivos internacionales – como los mundiales de fútbol – y finalmente las opiniones sobre sus perspectivas de futuro para quienes han vivido la terrible experiencia del tráfico.
Las presentaciones y el debate fueron moderadas por el padre Thomas Brennan, SDB, representante de los Salesianos ante las Naciones Unidas y, junto con el padre Chiarello, miembro de la Comisión del Comité de las ONG para detener el tráfico de seres humanos.