(ANS – Roma) – Recientemente se ha publicado el V volumen del “Epistolario. Introducción, textos críticos y notas”, que contiene cartas, publicadas y no publicadas, de Don Bosco. Este año, al igual que los volúmenes anteriores, fue editado por don Francesco Motto, para la serie Fuentes del Instituto Histórico Salesiano, publicado por la Librería Ateneo Salesiano.
El volumen de más de 600 páginas, contiene 422 cartas (de las cuales un tercio son inéditas) escritas en los años 1876 y 1877. Durante este tiempo Don Bosco estaba centrado en el fortalecimiento de las diez obras salesianas abiertas anteriormente, al abrir casi el doble en Italia, Francia y América Latina en sus inicios, en lanzar en las mismas áreas geográficas, las Hijas de María Auxiliadora (FMA). Confiesa él mismo:
“Dios nos ayude, y todo proceda de tal forma que el hombre común diga que es una fabula, y nosotros que es prodigio”.
En estos años Don Bosco se dedicó a la formación religiosa y a la educación de los Salesianos y de las FMA, para consolidar jurídicamente los dos institutos por él fundados, y en celebrar del primer Capítulo General de la Sociedad Salesiana. En el mismo espacio de tiempo, dio los últimos retoques a algunos documentos personales que pasarán a la historia, fundó la Obra de María Auxiliadora para las vocaciones eclesiásticas adultas, procedió a la fundación de la Asociación de Cooperadores Salesianos y la genial idea del Boletín Salesiano mensual. Evidentemente a un alto precio, el de su salud.
No le faltaron las espinas: las fricciones con Mons. Gastaldi, con importantes repercusiones en el clero de la arquidiócesis, los obispos piamonteses, la Santa Sede, con el mismo Papa Pío IX, los laicos y los sacerdotes de buena voluntad, así como para los Salesianos. La enorme preocupación, no sólo económica, por las tantas fundaciones en Italia y Francia, por las dos nuevas expediciones misioneras, por la enfermedad y la muerte de salesianos, por inesperadas oposiciones a las iniciativas culturales, sociales, y religiosas, etc.
Eventos y etapas de la historia salesiana son documentadas en estas cartas, enriquecidas por los aparatos críticos, testigos del minuto a minuto, correcciones sobre correcciones, copias sobre copias, originales autógrafos o con una sola firma, circulares impresas o escritas a mano, dirigidas a personas del clero secular o religioso (más de la mitad de todas las cartas), a los benefactores (72 cartas), a las autoridades civiles (37 cartas).
Cartas que hacen pensar, que mueven a reír, que hacen sufrir; cartas para estudiar, comparar, profundizar a veces para gustar. Ahora están al alcance de todos, con todas las informaciones útiles para comprenderlas mejor.