La Compañía de Jesús de Portugal inició una campaña solidaria para recaudar fondos destinados a la ayuda de las personas afectadas por la explosión en un almacén del puerto de Beirut, en Líbano. Este suceso dejó a más de 300 mil personas sin hogar.
La campaña fue lanzada en un comunicado de la agencia Ecclesia: “Esta campaña quiere responder a las peticiones de ayuda de los que están en acción en el lugar de los hechos, entre ellos muchos jesuitas, así como al deseo del Papa Francisco de que los cristianos apoyen al país en este momento de profunda necesidad”.
Ayer mismo, 16 de agosto, de hecho, el Papa volvió a invocar la solidaridad internacional para el Líbano, como ya lo había hecho en el Ángelus del domingo 9 de agosto. Concretamente, los fondos recaudados mediante la iniciativa se destinarán a la “Fundación Gonçalo da Silveira”, una ONG en favor del desarrollo, que los enviará a la Red Xavier, la plataforma internacional de organizaciones no gubernamentales de la Compañía de Jesús, que se encargará de su aplicación sobre el terreno, en colaboración con las autoridades locales.
“La explosión ha agravado un clima de gran tensión que ya existe”, explica el Padre Rui Fernandes, jesuita portugués que vive en Beirut desde hace un año y medio. Hay “mucha tristeza” en la ciudad, pero al mismo tiempo no faltan “gestos de pronta generosidad”, acompañados de una notable “capacidad de organización”. “Beirut está inundada de voluntarios, estudiantes universitarios, scouts católicos y musulmanes, miembros de Cáritas y del Banco de Alimentos -subraya el sacerdote- mientras la población sigue recogiendo los cristales rotos de la deflagración y sale a la calle para atender a los necesitados de medicinas o alimentos”.
Fuente: Vatican News
Foto: ANSA