(ANS – Luena) – Don Bosco llegó también al este de Angola, a Luena. Un sólo día, pero muy intenso. El acontecimiento, bien preparado desde hace tiempo, ha dejado una huella profunda en el tejido social y religioso de la ciudad: una huella de esperanza para el futuro salesiano de Luena y para el bien de los jóvenes del estado de Moxico.
La urna con la reliquia de Don Bosco, procedente de Benguela, llegó al aeropuerto de Luena el día 8 de agosto por la mañana. Esperaba para acogerla una multitud numerosa y animada. La vicegobernadora del estado de Moxico, la Sra. Adriana Sofia Cacuassa Bento, dirigió las primeras palabras de acogida: afirmando que “este gesto representa un momento de reconocimiento por el trabajo hecho por Don Bosco en Angola”.
La urna fue posteriormente llevada en procesión durante tres horas, pasando por las calles de Luena en medio de muchas personas curiosas y admiradas. A lo largo del recorrido se realizaron tres paradas, con pequeñas celebraciones: en el Centro María Auxiliadora, en la Catedral y en la Escuela Don Bosco.
Por la tarde hubo otros dos momentos importantes: la veneración por parte de los fieles en la iglesia de San Pedro y San Pablo y la celebración de la Eucaristía delante del Centro Juvenil Don Bosco, presidida por el obispo de la diócesis, Mons. Tirso Blanco, salesiano. Luego varios grupos de jóvenes y de adultos de la parroquia se alternaron en una vigilia de oración, meditando y cantando durante toda la noche. A primera hora de la mañana siguiente, el superior de los Salesianos de la Visitaduría “Mama Muxima”, don Filiberto Rodríguez Martín, presidió una celebración eucarística. A las 6:30 el avión con los restos mortales de Don Bosco salió en dirección a Calulo.
En una entrevista de la agencia “Angop”, el obispo de Luena, Mons. Blanco, declaró que la llegada de la urna a Moxico ha sido un momento histórico y extraordinario no sólo para los católicos; un acontecimiento que ha ayudado a fortalecer el Evangelio de Jesucristo en la región.
En Luena, en los años sesenta, se inició un fuerte movimiento de lucha contra los colonizadores y hace diez años se firmó la paz, tras 27 años de guerra. Los salesianos están presentes en esta ciudad desde 1981; desde el año 2002 hay también una comunidad de Hijas de María Auxiliadora. Ambas comunidades religiosas animan muchas actividades de evangelización y de promoción humana: la parroquia de San Pedro y San Pablo (con un territorio de misión de 80.000 quilómetros cuadrados), la escuela Don Bosco (con 4.000 alumnos, distribuidos en 3 turnos), el Centro Educativo María Auxiliadora (con 1.500 alumnos), el Centro Profesional Don Bosco (centro de trabajo y de formación), el Centro Juvenil Don Bosco y el Centro de salud Artémides Zatti.