Una delegación de representantes de la Familia Salesiana dio la bienvenida en el aeropuerto de Camboya (video aquí). Siguiendo la costumbre Asiática, el Rector Mayor colocó algunas incienso dentro de una estatua de Don Bosco, el lugar donde llegaron los primeros Salesianos a Camboya un 24 de mayo de 1991.
Por la tarde, se inauguró una exposición sobre los numerosos proyectos llevados a cabo por la Familia Salesiana desde los tiempos de los campos de refugiados en Tailandia (1988) y el lanzamiento de la “Fundación Don Bosco” de Camboya (1991), celebrando así la apertura de los 25 años de presencia salesiana en el país.
El Mons. Olivier Schmitthaeusler, Obispo del Vicariato Apostólico de Phnom Penh, a continuación, presidió la misa, concelebrada por el Rector Mayor. “En 25 años los salesianos han trabajado mucho para los niños y los jóvenes camboyanos, construyendo no sólo de grandes obras, sino grandes comunidades que han tenido un gran impacto en la sociedad y en la Iglesia de Camboya “, dijo el obispo.
Mientras que al final del día, durante las “buenas noches salesianas”, el P. A. F. Artime se dirigió a los jóvenes: “Ustedes son alegres, amables, felices y llenos de vida. ¡Sigan así! Y, por favor, mantengan siempre el amor de Dios en sus corazones para que se mantengan felices siendo buenas personas”.
En la mañana de hoy, lunes 29, mientras que unos 1.000 jóvenes de todas las casas salesianas del país, participaban en torneos deportivos; los miembros de la Familia Salesiana y los animadores del Movimiento Juvenil Salesiano se reunieron con X Sucesor de Don Bosco para tratar el tema de la “cultura vocacional” en Camboya.
Por otro lado, el ex presidente de los Exalumnos de Don Bosco presentó las actividades llevadas a cabo sobre las buenas prácticas para ayudar a los estudiantes de los institutos salesianos en la búsqueda de trabajo. A continuación, el Rector Mayor, después de expresar su alegría por los progresos ya realizados en 25 años y la información y perspectivas sobre el Familia Salesiana, ha indicado algunos elementos para proseguir el crecimiento: “Los invito a hacer todo lo posible en el instaurar lo mejor del carisma salesiano en este país. Estamos llamados a construir y transformar la cultura de Camboya, la sociedad y la Iglesia a través de nuestro carisma educativo. El espíritu de familia, el respeto a las mujeres, la solidaridad con los pobres y la justicia deben ser nuestras principales convicciones”.
Prestando especial atención a los Exalumnos y a los Cooperadores Salesianos, les pidió llevar el espíritu de Don Bosco en la sociedad y tener cuidado en la educación y la formación, recordando las numerosas experiencias en el mundo, especialmente en América Latina, en la que las escuelas salesianas están confiadas plenamente a los laicos en la misión salesiana.
