(ANS – Roma) – En respuesta a una pregunta de la Asamblea, como parte del compartir de la relación del Rector Mayor, el P. Francesco Cereda, Consejero General para la Formación y Regulador del CG27, no tuvo dificultad en reconocer que la formación permanente es una área en la que “tenemos un gran déficit”. Sin embargo, también señaló que “el panorama es variado y depende de las Inspectorías. Estamos en camino con mucho por recorrer”.
Es en esta perspectiva que deben ser situadas las “Buenas Noches” del P. Jaime Morales, Inspector de Colombia-Bogotá, que en la noche del Jueves 13 de marzo presentó la realidad significativa de los Centros Regionales de Formación de la Región Interamérica, abiertos en sus servicios a toda la América salesiana. Se trata del Centro de Formación Permanente en Quito, Ecuador; del Centro Regional para la Formación Específica del Salesiano Coadjutor (CRECER), con sede en la Ciudad de Guatemala – gestionado por los Inspectores de las dos regiones americanas – y el Don Bosco Hall, administrado por la Inspectoría de San Francisco.
La primera iniciativa nació después del Capítulo General Especial, a inicios de los años 70, y se ha traducido en el Centro de Quito. “La formación inicial y permanente de los salesianos de la región – dijo el P. Morales – ha sido una preocupación constante que los inspectores han expresado desde el comienzo de las dos regiones de América”.
Desde la creación en 1974, y durante 38 años, el Centro de Quito ha podido disfrutar de la competencia del P. Fernando Peraza Leal, un “padre y maestro, con pasión científica, pero sobre todo con el testimonio vibrante y entusiasta”, del cual el centro “ha heredado un estilo, una pedagogía, una metodología de estudio sobre Don Bosco que se transmite en los diferentes cursos de animación salesiana del Centro: escuela de Salesianidad, jornadas para los nuevos directores, formación de los formadores, preparación inmediata de los diáconos al sacerdocio, encuentros de Pastoral Juvenil y de párrocos, y por último, la Escuela de Acompañamiento Espiritual”. Hasta ahora se han realizado 585 cursos, con la participación de cerca de 17.000 personas.
La iniciativa de Cresco, lanzada en 1995, se centra en la formación específica del salesiano coadjutor, que “no debe confundirse o identificarse con la formación profesional”, y tiene como referencia el tiempo precedente de la formación permanente.
La tercera iniciativa es el “Don Bosco Hall” en Berkeley, creado para la formación permanente a la Salesianidad de los hijos de Don Bosco anglófonos. Su proyecto, probablemente el más conocido es la digitalización, la reedición y el relanzamiento de la “Revista de Estudios Salesianos” (www.SalesianJournal.org). Pero no menos importante es la actividad del P. Arthur Lenti, que también ha dado para imprimir a Don Bosco: Historia y carisma, publicado en Inglés y traducido al español, portugués e italiano.