VATICANO (ACI/EWTN Noticias).- El Papa Benedicto XVI señaló que todos los cristianos deben caminar juntos por el “camino estrecho” de la fidelidad a la soberana voluntad de Dios, que quiere que todos lleguen a la santidad.
Así lo indicó el Santo Padre a una delegación luterana de Finlandia, en ocasión de la fiesta de San Enrique de Uppsala, patrón de ese país. El encuentro también se da en la víspera de la Semana por la Oración de la Unidad de los Cristianos cuyo tema este año está tomado del libro del profeta Miqueas: “¿Qué exige el Señor de nosotros?”.
Benedicto XVI señaló que “el profeta deja claro, por supuesto, lo que el Señor exige de nosotros: se trata de ‘hacer justicia, amar la misericordia, y caminar humildemente con nuestro Dios’”.
“El tiempo de Navidad que acabamos de celebrar nos recuerda que Dios es el que desde el principio ha caminado con nosotros, y aquel que, en la plenitud de los tiempos, se encarnó para salvarnos de nuestros pecados y para guiar nuestros pasos en el camino de la santidad, la justicia y la paz”.
El Santo Padre recalcó luego que “caminar humildemente en la presencia del Señor, en obediencia a su palabra de salvación y con la confianza en su plan de gracia, brinda una imagen elocuente no sólo de la vida de fe, sino también de nuestro viaje ecuménico por el camino hacia la plena y visible unidad de todos los cristianos”.
“En este camino de discipulado, estamos llamados a proseguir juntos por el camino estrecho de la fidelidad a la voluntad soberana de Dios para hacer frente a cualquier dificultad u obstáculo que se pueda encontrar”.
Por lo tanto, dijo el Papa, “para avanzar por el camino de la comunión ecuménica es necesario que estemos cada vez más unidos en la oración, cada vez más comprometidos con la búsqueda de la santidad, y cada vez más empeñados en los ámbitos de la investigación teológica y de la cooperación al servicio de una sociedad justa y fraterna”.
“Siguiendo este camino de ecumenismo espiritual, caminamos verdaderamente con Dios y unos con otros en la justicia y el amor porque, como afirma la Declaración Conjunta sobre la Doctrina de la Justificación: ‘Somos aceptados por Dios y recibimos el Espíritu Santo que renueva nuestros corazones, mientras nos capacita y nos llama a las buenas obras’”.
El Papa Benedicto XVI expresó su esperanza de que la visita a Roma de la delegación finlandesa “contribuya a fortalecer las relaciones ecuménicas entre todos los cristianos” en ese país.
“Demos gracias a Dios por todo lo que se ha logrado hasta ahora y oremos para que el Espíritu de la verdad guíe a los seguidores de Cristo en vuestro país hacia un amor y una unidad cada vez más fuertes, mientras se esfuerzan por vivir en la luz del Evangelio y por iluminar con ella las grandes cuestiones morales que enfrentan nuestras sociedades”.
“Si recorremos juntos con humildad el camino de la justicia, la misericordia y la justicia que el Señor nos ha indicado, los cristianos, no sólo vivirán en la verdad: serán también faros de alegría y esperanza para todos aquellos que buscan un punto seguro de referencia en nuestro mundo en constante transformación”, concluyó.