Una formación práctica ofrecida por los misioneros salesianos en Lagos ha permitido a una quincena de menores y jóvenes en situación de vulnerabilidad aprender el oficio de costura y confección. El curso, práctico en un 90%, y que también ha contado con la formación de una decena de profesores, ha continuado con el acompañamiento de las alumnas y la entrega de un kit básico para poder empezar a trabajar.
Nigeria es el país más poblado de África y la segunda economía más grande del continente. Sin embargo, también tiene tasas de pobreza extrema, con más de 100 millones de personas que viven con menos de 1 euro al día. Los misioneros salesianos han llevado a cabo en este país una iniciativa que da oportunidades de romper el círculo de pobreza a las mujeres más jóvenes y les permite vivir contribuir al desarrollo de sus familias con independencia. Asimismo, les permitirá tener nuevas oportunidades después de superar la pandemia y las consecuencias del confinamiento.
En la ciudad más importante de Nigeria, Lagos, los Salesianos han llevado a cabo un curso formativo para menores y jóvenes en el área textil. La formación, mayoritariamente práctica, se ha completado con un periodo de seguimiento y acompañamiento de las alumnas en sus primeros pasos en el mundo laboral. A la finalización del curso cada alumna recibió un kit básico para que pudieran empezar a trabajar como costureras por su cuenta.
Un curso práctico de costura ha permitido a 15 menores y jóvenes de Nigeria aprender un oficio
El curso estaba diseñado inicialmente para atender sólo a 10 menores de edad, pero el interés por el proyecto fue tan alto que luego se expandió a 15. La mayoría de las alumnas eran originarias de la capital del país y el resto procedían de Ijebu Ode. Además, la iniciativa formativa contó con 10 profesores que se han volcado en enseñar las habilidades de sastrería y costura a las aprendices.
La formación ha tenido un componente práctico del 90% y ha desarrollado la enseñanza de los fundamentos del oficio, así como de diversas técnicas de costura. Las lecciones teóricas han proporcionado a los jóvenes nociones, trucos y consejos sobre marketing, gestión empresarial, comunicación interpersonal y todas aquellas habilidades que son fundamentales para el funcionamiento de un negocio, grande o pequeño.
La independencia económica que conseguirán con su trabajo les permitirá también alejarse de las mafias que trafican con mujeres. De igual manera, gracias a su autonomía y a sus conocimientos, se convertirán en líderes para fomentar el empleo juvenil e impedir la migración ilegal.
Las jóvenes también completaron unas prácticas de un mes antes de que les entregasen un kit que les permitirá comenzar con sus proyectos de autoempleo. Durante ese tiempo permanecieron bajo la supervisión de los profesores para hacer un seguimiento su plan de negocio, evaluar su trabajo y asegurarse de que sabían utilizar todas las herramientas de trabajo de manera efectiva.
Fuente: Misiones Salesianas