(ANS – Turín)– El Bicentenario fue inaugurado oficialmente por el Rector Mayor, Don Ángel Fernández Artime. El día comenzó con la población de Castelnuovo, y muchos otros fieles que acompañaron la estatua de la Madonna della Cintura a la plaza del Colle Don Bosco, sede de los festejos. En la alternancia de espectáculos de magia, acróbatas, abanderados, en la sucesión de las actuaciones de la banda y el grupo histórico, con la ayuda y guía del Rector de la Basílica P. Egidio Deiana, se ha creado el ambiente perfecto para dar cabida a la gran cantidad de peregrinos reunidos para la fiesta.
Las autoridades, tanto religiosas (en la figura de Mons. Guido Fiandino, obispo auxiliar de Turín, y Mons. Ravinale Francesco Guido, obispo de Asti), como civiles (representados por el prefecto de Asti, Pierluigi Faloni), se dirigieron al Rector Mayor señalando la importancia de la figura de Don Bosco en la sociedad actual como en la experiencia de vida personal.
Don Ángel destacó, en el agradecimiento general por la acogida recibida, como el año que vamos a vivir será un verdadero jubileo para toda la familia salesiana y para todas aquellas personas que se inspiran en el testimonio del Santo de Castelnuovo: solo de esta manera será posible encontrar aquella renovación necesaria, apta para inspirar acciones y obras verdaderamente fecundas en la esperanza y en la paz.
Al margen de los eventos, los periodistas pudieron encontrar y dirigir sus preguntas al décimo sucesor de Don Bosco en el sugestivo entorno de la Casetta. Los temas tratados fueron muy variados y tocaron la actualidad e interrogantes del hombre contemporáneo. Así Don Ángel tuvo la oportunidad de reafirmar fuertemente que allí donde se viven situaciones de indigencia y sufrimiento los salesianos permanecen y no huyen, y que el mundo de la comunicación es un universo que tendrá siempre toda la atención por parte de los hijos de Don Bosco, porque los periodistas participan en el continuo y necesario recuento del bien.
El momento más significativo fue por supuesto la concelebración eucarística que vio la Basílica del Colle Don Bosco llenarse de fieles y de jóvenes. Sacerdotes salesianos de toda Italia, se acomodaron en torno a su Rector Mayor quien en su homilía y en los saludos finales reiteró: “Un Don Bosco forjado de esta manera es aquel que como – Padre y maestro de la juventud – es un signo de la Providencia Dios que, – inspirando todo buen propósito – nunca permite que en su propia Iglesia falten hombres y mujeres que actualizan el Evangelio y el Misterio de la Encarnación”, ayer, hoy y mañana, en un camino que pase de la admiración a la imitación.
Al final deuna intensa jornada que celebró el cumpleaños número 199 de Juan Bosco, el alcalde de Castelnuovo, Giorgio Musso, otorgó la ciudadanía honoraria al Rector Mayor invitando a cada hijo de Don Bosco a sentirse su conciudadano.