La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid 2011 supuso un impacto económico en España de 354,3 millones de euros, según un estudio realizado por PwC. El informe concluye también que los participantes extranjeros dejaron en el país más de 147 millones de euros por los gastos generados durante su estancia esa semana.
Durante la Jornada Mundial de la Juventud, que se celebró en Madrid del 16 al 21 de agosto, participaron en sus momentos más multitudinarios entre 1,3 y 1,5 millones de personas, según fuentes oficiales.
Son las cifras puras y duras de un evento –criticado por algunas instancias evidentemente mal informadas en cuanto al coste para las arcas españolas- que ciñéndose a los datos, y sin contar el beneficio espiritual e incluso ético para el país, que no tiene precio, demuestran lo que supuso la Jornada en un agosto madrileño y español de vacas flacas y crisis prolongada.
De los asistentes, algo más de 470.000 personas provenían de 189 países. También participaron 840 obispos y cardenales, y se acreditaron 4.935 periodistas para el evento.
De los 354,3 millones de euros que ingresó todo el país, como consecuencia de la actividad de la JMJ y del programa previo de los Días en las Diócesis, en el que participaron en torno a 120.000 jóvenes, en más de 70 ciudades españolas, la Comunidad de Madrid ha sido la más beneficiada con un impacto económico de 231,5 millones de euros, el 90% del total.
La actividad de la organización tuvo un impacto directo de más de 50 millones de euros, cifra del gasto realizado para hacer de la JMJ de Madrid una realidad. El sector más beneficiado fue el de la hostelería –con más de 25 millones de euros–, la construcción –10 millones–, material electrónico –5 millones–, y los de confección e imprentas –5 millones de euros–.
Dada la actividad económica generada, el cálculo más conservador estima que, sólo en concepto de IVA, el Estado ingresó al menos 28,3 millones de euros.
Creación de empleo
Los sectores más beneficiados por el aumento de la actividad económica en torno a la JMJ fueron hostelería, comercio minorista y transporte terrestre. En dichos sectores también aumentó el empleo. La JMJ permitió la generación de 4.589 empleos, 2.894 de ellos en la Comunidad de Madrid.
El sector hotelero también incrementó su actividad. La ocupación hotelera subió un 12,1% en la Comunidad de Madrid y 2,8 en el conjunto de España. Las pernoctaciones aumentaron en un 29% en Madrid y un 6,2% en el conjunto de España, debido a los asistentes a la JMJ que se alojaron en establecimientos hoteleros.
El estudio de PwC basó sus cálculos en el gasto directo realizado por la organización de la JMJ, así como cifras provenientes de la contabilidad autonómica y nacional, a través del Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid, y el Instituto Nacional de Estadística (INE).
PwC, firma líder de servicios profesionales en el mundo, tiene gran experiencia en estudios de impacto económico. Entre otros muchos, realizó el estudio de impacto económico de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, del AVE Madrid-Valencia, de la privatización de la gestión de los aeropuertos, o la implantación de sistemas de derechos de emisión de CO2.
Valoraciones positivas
Los efectos de la JMJ también se notarán a medio y a largo plazo en España como una experiencia “muy positiva”, para más del 90% de los participantes. El 78,2% de los peregrinos extranjeros nunca habían visitado España antes de la JMJ. Tras su participación en este evento, el 89,6% ha manifestado su intención de volver en el futuro.
Todas las administraciones públicas –Gobierno, Comunidad de Madrid, Ayuntamiento de la capital y consistorios municipales de la región- manifestaron su satisfacción por el éxito de la JMJ. Y en especial por “la capacidad organizativa del país en seguridad, atención sanitaria, logística, transporte, etc, para la colaboración entre las diferentes administraciones públicas y con el sector privado, y para nuestra proyección internacional”.
Otros elementos que avalan el éxito de la JMJ de Madrid fueron el récord en inscripciones (480.000), en número de países participantes (189), y haber cerrado el balance en equilibrio.
Los proveedores alabaron las condiciones de prestación de servicios, el proceso de cobro de facturas y la facilidad de trato con la organización.
Por su parte los delegados internacionales de la JMJ –organizadores locales en cada país- valoraron positivamente la página web, el programa cultural y el proceso de atención a los obispos.