Los misioneros salesianos en Nepal agradecen la solidaridad de todos los ambientes salesianos en forma de donativos que han empezado a recibir, “porque queremos llegar al mayor número de familias posible, y hay muchos lugares a los que aún no ha llegado la ayuda y ha habido mucha destrucción”, explica el padre John Jijo, misionero salesiano y uno de los responsables de la coordinación de la ayuda en Katmandú.
La desolación y el caos entre la población se acrecientan en el valle de Katmandú, la zona más afectada por el terremoto del pasado sábado, al comprobar que la ayuda aún no ha llegado a numerosas zonas devastadas. El número de fallecidos ya supera ampliamente los 6.000, mientras que los heridos duplican esa cifra. El Gobierno baraja una previsión de 10.000 muertos y pronto comenzará a hablarse de desaparecidos por las pocas esperanzas que hay de encontrar supervivientes bajo los escombros.
Los misioneros salesianos, junto a las Hijas de María Auxiliadora, personal docente, alumnos y antiguos alumnos, coordinan la atención y la ayuda en una de la zonas más devastadas del valle de Katmandú: “Estamos trabajando en una zona donde 300.000 casas han quedado destruidas por el terremoto y la población de localidades más alejadas también acude a nosotros para pedir ayuda”, explica el padre John.
El Gobierno de Nepal ha concedido a los Salesianos todos los permisos para que coordinen y repartan la ayuda. El Equipo de Rescate Don Bosco colabora con otras organizaciones humanitarias, y la Oficina de Desarrollo del Distrito le ha pedido que coordine la ayuda junto con los Comités de Desarrollo de los pueblos y reparta productos de primera necesidad y materiales de emergencia a los afectados.
En Sindhupalchok, un pueblo cercano al valle de Katmandú y donde han muerto más de 1.170 personas, los misioneros salesianos han sido los primeros en llegar con un camión para repartir la primera ayuda de emergencia.
“Hay muchos lugares donde aún no ha llegado la ayuda y la situación es dramática”, explican los misioneros. Actualmente los misioneros están gastando alrededor de 2 lakh de rupias al día (aproximadamente 3.000 euros) en la compra de lo necesario en un supermercado al que se le van acabando los productos. Dentro de unos días se tendrán que enviar alimentos y elementos de primera necesidad desde la India.
Estos gastos están siendo posibles porque los Salesianos ya han recibido las primeras ayudas de las distintas procuras misioneras y ONG salesianas del mundo. “Esas ayudas están permitiendo ayudr a los pueblos más cercanos, pero hemos recibo solicitudes también de otros más alejados”, comenta el padre Jijo.