El pasado 14 de abril se inauguraron en “Villa María Auxiliadora” de Grocio Prado (Chincha) unos Juegos de parques: balancín, tobogán, columpio, barras de mono, etc., construidos con el apoyo de la Fundación Don Bosco, para el esparcimiento de los niños del lugar. En la bendición estuvieron presentes el padre Raúl Acuña, la señorita Lourdes Liendo y el padre Vicente Santilli.
Esta actividad en Chincha es parte del programa de atención a las familias de la Villa María Auxiliadora, en donde se edificó un conjunto de viviendas para los damnificados del terremoto de 2007. La intención de la Congregación Salesiana era dar a las familias vivienda y formación humana y cristiana. Por este motivo, desde el mes de febrero, dos voluntarias: la sicóloga Noemí Rodríguez y la educadora María Reyes, estuvieron una semana trabajando con las familias y los niños de Villa María Auxiliadora.
Durante el triduo de la Semana Santa, también estuvo con ellos el padre Vicente Santilli SDB, animador del área misionera y voluntariado. Como fruto de estos encuentros, ya se han constituido dos comunidades de base: una se reúne los miércoles y otra los jueves, acompañadas siempre por parejas guías y la hermana Margarita Flores de la comunidad de las Canonesas de la Cruz. Y cada domingo dos hermanas de esa comunidad dirigen la celebración de la Palabra en la capilla de la Villa.
Durante los encuentros del Triduo Pascual, varias parejas que aún no están casadas por la Iglesia han solicitado el matrimonio religioso. Por eso, durante todo este año, de acuerdo con el párroco de Grocio Prado, el padre Martín Cabrera de la Cruz, tendrán la preparación necesaria para celebrar al fin del año un matrimonio comunitario. Hay que ir sembrando poquito a poco y dejar al Señor que haga producir frutos de vida cristiana. A esto nos invita también el año de la Fe y de la Nueva evangelización.