Los peruanos podemos felicitarnos por la conducta cívica manifestada en la primera jornada electoral del pasado 10 de abril; lamentamos como se está llevando la actual Campaña electoral y esperamos que la segunda vuelta del próximo domingo 5 de Junio pueda ser una reafirmación de la democracia eligiendo un gobernante que se comprometa a trabajar por el progreso del Perú.
2. En este compromiso, el desarrollo social debe fundarse en el respeto y la promoción de la persona humana y sus derechos y debe generar la participación de todos en los servicios básicos de salud, nutrición, agua, educación, vivienda y seguridad ciudadana, especialmente de los más necesitados. Es incuestionable que el crecimiento económico del país debe llevar de por sí a un auténtico desarrollo humano de todos los peruanos.
3. Una nación construye su futuro desde su historia, ignorarla implicaría un ejercicio irresponsable de ciudadanía. En este contexto, nos permitimos invocar a los candidatos y electores para que en nuestro país no se repitan conductas antidemocráticas, violaciones de derechos humanos, indebidas estatizaciones, corrupción, amenazas a la libertad de expresión y modelos de desarrollo que sólo puedan traer atraso y pobreza al país.
4. En este momento decisivo, reafirmamos la disponibilidad de la Iglesia Católica – cuya primera responsabilidad es anunciar el Evangelio, a Cristo muerto y resucitado; proclamar la defensa de la vida, desde su concepción hasta su muerte natural, e indicar el valor de la familia como célula esencial de la sociedad- y por eso colabora con el país en su desarrollo histórico, cultural y moral, como lo reconoce la Constitución Política del Perú. En este sentido, no podemos olvidar que la Iglesia Católica cumplió, cumple y seguirá cumpliendo un importante rol de respeto y valoración en todos los estratos de nuestra sociedad, especialmente con las más pobres y en los lugares más alejados del Perú.
5.La confianza y la esperanza de que en los próximos cinco años nuestra Patria fortalecerá su sistema democrático con equidad y justicia social debe animar a votar con convicción y responsabilidad por la opción que cada ciudadano considere justa y válida para el Perú. Es el momento de pensar no sólo en los beneficios individuales o grupales, sino en el desarrollo integral de toda nuestra nación.
6. Del mismo modo debemos recordar que todo ciudadano merece respeto e información veraz. En este sentido invocamos a los periodistas y a los Medios de Comunicación Social a informar con la máxima responsabilidad, diferenciando su propia opinión de la objetividad de la información. Los invitamos a ejercer la libertad de expresión, con imparcialidad y transparencia, buscando la verdad, la justicia y el bien común.
7. Invocamos a Dios para que ilumine a los electores y candidatos en esta segunda vuelta electoral para construir juntos un mejor país en Democracia y respetuoso del Estado de Derecho. Finalmente, hacemos un ferviente llamado para que en estos últimos días de campaña electoral se viva un clima de respeto, tolerancia y concordia para facilitar el deber y el derecho a votar libremente.
Lima, 26 de mayo de 2011
+ Miguel Cabrejos Vidarte OFM.
Arzobispo Metropolitano de Trujillo
Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana
+ Lino Panizza Richero OFM Cap.
Obispo de Carabayllo
Secretario General de la Conferencia Episcopal Peruana