Las tareas de restauración de la Basílica María Auxiliadora siguen su rumbo. Con esfuerzo y dedicación, los maestros encargados de la obra, terminaron de colocar el reloj en la torre. Se espera que, en los próximos días, venga de Italia el encargado de instalar el nuevo funcionamiento y el sistema de controles para que este equipo empiece a dar la hora. Un servicio que beneficiará a la comunidad.
Debido al estado de oxidación en el que se encontraba esta reliquia, fue necesario, en algunas casos, rehacer algunas piezas. El principal cambio que se notará son los números del reloj, ya que han sido cambiados y mejorados. Las anteriores eran muy anchas. Otro cambio significativo que se llevó a cabo fueron las manijas, debido deterioro era necesario rehacer estas piezas. Algunos de los círculos los tuvieron que cambiar, mientras que otros solo necesitaban repararlos y, nuevamente, pintarlos.