Los trabajos de restauración de la Basílica María Auxiliadora siguen su rumbo. Esta vez, los trabajadores encargados de limpiar, resanar y pintar las torres laterales de la iglesia, han logrado culminar en más de un 60 % los trabajados de limpieza de la fachada.
El trabajo es duro pero ya está dando sus frutos. Ahora la parte delantera de la Basílica luce con otro color y libre de impurezas. Todo esto se sigue dando, gracias al esfuerzo de los trabajadores y de las personas que han venido colaborando a lo largo de este proceso de restauración. Se espera que en los próximos días culminen con las labores que faltan.