La Catedral de San Pedro de Lurín fue escenario de la celebración central de las Bodas de Oro Sacerdotales de Monseñor José Ramón Gurruchaga Ezama, Salesiano y Obispo Emérito de la Diócesis de Lurín, evento realizado el viernes 11 de febrero, en un acto litúrgico que él mismo presidió ante un auditorio con lleno total de fieles y amigos y concelebrado por el Nuncio Apostólico del Perú, Obispos, el Clero Diocesano, religiosos y Salesianos Sacerdotes.
A su ingreso a la Catedral Monseñor José Ramón -conocido cálidamente como Padre Obispo– fue ovacionado por la multitud que se dio cita en el templo y le expresó el gran cariño y reconocimiento, acto donde además asistieron autoridades civiles y militares.
La celebración se inició con la lectura de la Bendición Apostólica enviada por el Santo Padre Benedicto XVI hecha por Monseñor Bruno Musarò, Nuncio Apostólico de su Santidad en el Perú. Dicha Bendición comprende un fraterno reconocimiento al empeño episcopal del Padre Obispo y a su fidelidad al magisterio de la Iglesia.
En otro momento de la ceremonia, Monseñor Salvador Piñeiro, Obispo Castrense del Perú, en una emotiva homilía habló de la importancia del Sacerdocio que es participación al de Cristo, tomando como referencia la figura de Monseñor José Ramón Gurruchaga.
“Cuánto tenemos que agradecer el don del Sacerdocio en la vida de José Ramón, el sacerdote es el hombre que nos da las cosas de Dios, el que hace el bien, el educador, el maestro de la fe, el que santifica… es pontífice!…crea puentes de entendimiento entre los hombres y con Dios” “Por eso en este día de reflexión todos queremos tomar un compromiso hemos venido aquí para alegrarnos con Monseñor, para vivir esta experiencia de gracia”, expresó Piñeiro.
En otro pasaje Monseñor Piñeiro hizo un resumen de la vida y trayectoria de Monseñor Gurruchaga, recordando momentos significativos de este ilustre salesiano que trabajó incansable como sacerdote y educador al servicio de la juventud y de las poblaciones más necesitados en diferentes obras de la Congregación Salesiana en el Perú , con una alusión cariñosa al tiempo en que trabajó en Puno en la Normal Pedagógica del Altiplano; en la Casa de Formación de Chosica y en la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús en Magdalena del Mar. Luego en México, y cómo Obispo de las Diócesis de Huaraz.
A su turno el Obispo de Lurín Carlos García Camader, en representación de los 70 Obispos del Perú, agradeció la nutrida asistencia de sacerdotes y le expresó su agradecimiento a Monseñor Gurruchaga “porque su perseverancia, nos anima a todos a seguir también perseverando en la fidelidad del día, a los pies de Jesucristo que representa, gracias Monseñor por ser como es y gracias por haber dicho sí al sacerdocio, por esos 50 años de gozo no son del pasado sino de un presente”, destacó el titular de la Iglesia de Lurín.
Monseñor José Ramón sintió con mucha emoción el cariño de todos los presentes en la misa de su Jubileo. La ceremonia finalizó con un mensaje que quedará en la memoria de quienes participaron del acto “Cuando uno va avanzando en años le vuelve la niñez, un poquito ya lo estoy sintiendo, me siento más niño, más infante por eso ante el cariño que ustedes me han expresado, yo no tengo otra cosa que decirles, lo que solía decir cuando era niño: “Eskerrik asko” (en lengua vasca) …. “muchas gracias” a cada uno de ustedes.
DATOS INFORMATIVOS
Monseñor José Ramón Gurruchaga SDB.
Primer Obispo de la Diócesis de Lurín.
Nació el 29 de marzo de 1931 en España. Sus padres de origen Vasco le enseñaron a vivir bajo la mirada amorosa de Dios y la honradez del que vive en su trabajo siendo adolescente dejó la escuela y entró al seminario salesiano de Baracaldo, cerca de Bilbao.
Al realizar su profesión religiosa pide ir de misionero a donde pudiera ayudar y le necesiten. En 1951 viaja a Perú y como el cuenta, el 02 de enero de 1952 se bautizó cholo en el lago Titicaca, puno donde estuvo cuatro años, luego fue a Arequipa y en 1955 le envían a estudiar a la Universidad Salesiana de Italia. Se ordenó sacerdote el 11 de febrero de 1961 en la Basílica María Auxiliadora, estudió pastoral en la Universidad de Salamanca, España, y de allí de nuevo a su querido Perú.
Estuvo nueve años en Chosica, fue formador de los seminaristas salesianos. Director en el Politécnico Salesiano de Lima y párroco de Magdalena del Mar.
Estuvo seis años en México y regresó al Perú en 1980, fue provincial de los salesianos. Y el 28 de febrero de 1987 el papa lo nombra obispo de Huaraz.
En diciembre de 1996 se crean nuevas diócesis entre ellas la Diócesis de Lurín y el Papa lo nombra para ser su primer obispo. Toma la posesión el 25 de enero de 1997 y escoge como lema “fiat voluntas tua”.
Es obispo emérito de la Diócesis de Lurín desde julio del 2006, actualmente vive en nuestra Diócesis porque es su deseo.